Energías limpias darían 230% más de lo que hoy se genera

Energías limpias darían 230% más de lo que hoy se genera

Alexandra Hernández, líder del gremio de las renovables, comentó que se podrían ofrecer 62.000 megavatios hacia 2050: tres veces más que la capacidad actual.
La economista Alexandra Hernández, quien hasta hace pocas semanas fue vicepresidente de Asuntos Económicos y Regulatorios de la Asociación Colombiana del Petróleo y Gas (ACP), es la nueva directora ejecutiva de SER Colombia, el gremio que reúne a las empresas del sector de las energías renovables en el país.

En diálogo con EL COLOMBIANO, la líder gremial recalcó que Colombia tiene gran potencial para desarrollar proyectos de energías limpias con 32.000 megavatios (MW) en plantas solares y 30.000 MW en parques eólicos, lo que equivale a más de tres veces la capacidad instalada que hoy tiene el país.

Así mismo, con respecto a la nueva subasta de energía, Hernández subrayó que, si el objetivo es que los proyectos renovables no convencionales compitan, será necesario poner en firme los proyectos de resolución de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) sobre las metodologías del cargo por confiabilidad para la tecnología solar y eólica.

¿Cuál es el panorama de la transición energética en Colombia?

“Estamos hablando de un potencial de 32.000 MW en plantas solares y 30.000 MW en parques eólicos, lo que equivale a más de tres veces la capacidad instalada que hoy tiene el país, cifras que salen de nuestra hoja de ruta de penetración de fuentes renovables no convencionales a 2050.

Y desde el punto de vista del consumo, es importante seguir trabajando en la electrificación de la economía que implica acelerar la penetración de vehículos eléctricos y, fomentar la gestión de la demanda mejorando la eficiencia energética en industria y hogares. La transición en la oferta energética en el país tiene sentido en la medida que también cambien los hábitos de consumo”.

¿Cuáles son los retos para avanzar en el desarrollo de las energías limpias?

“Para atender los desafíos de corto y mediano plazo en la oferta energética, evitar riesgos de apagones y salir bien librados de un fenómeno de ‘El Niño’ como el que se viene anunciando, debemos redoblar esfuerzos para poner en marcha los proyectos renovables que las empresas están preparando. Se requiere de una articulación con el Gobierno Nacional, autoridades regionales y comunidades, para facilitar todo los procesos de consultas previas, licencias, y en general trámites y permisos, que son los que van a permitir la puesta en marcha de estas iniciativas.

Así mismo, sigue siendo necesario complementar el marco de política pública y regulatoria que existe en Colombia, para habilitar el cierre financiero de los proyectos de fuentes renovables no convencionales y balancear la cancha entre generadores y operadores a la hora de conectar y poner en operación los proyectos, ya que los retrasos por parte de operadores afectan las inversiones y cronogramas de los generadores”.

¿Cuáles fórmulas plantea el sector para destrabar proyectos renovables como los de La Guajira?

“La apuesta desde la Asociación va encaminada hacia el fortalecimiento institucional de los equipos de trabajo para apoyar el proceso de licenciamiento, trámites ambientales y consultas previas. Así como articular las políticas de transición energética con el ordenamiento territorial, mejorar los incentivos tributarios y de mercado que permitan aumentar la capitalización de recursos para la transición energética, como lo es la industrialización y el desarrollo de nuevos nichos de mercado local”.

¿Cuáles son las propuestas para que las energías limpias tengan un mayor protagonismo en la matriz de generación?

“Nuestras empresas asociadas se encuentran preparando proyectos renovables con un 16% de la capacidad total instalada actual para entrar en los próximos dos años, esto dará un protagonismo significativo que impactará la matriz de generación de energía eléctrica. De hecho, el inicio de operación de estos proyectos identificados equivalen a la misma capacidad que actualmente tiene el parque de generación a gas. Buscamos acelerar el ingreso de los proyectos para que de esta forma, la matriz sea mayoritariamente de energía renovable”.

¿Cómo será la articulación con el gobierno para integrar los fuentes renovables al sistema interconectado?

“Estamos jugando un papel fundamental como gremio para llevar propuestas que aceleren la entrada de proyectos renovables y lograr así la consolidación de la transición energética. Para esto debemos articular los ministerios y autoridades regionales y, adicionalmente, encontrar un balance entre la expansión de transmisión y de generación, pues los proyectos no lograrán ser integrados al sistema interconectado nacional si no existe la ruta de transmisión”.

¿Cómo analizan la nueva subasta que programó el gobierno?

“Si el objetivo es que los proyectos renovables no convencionales compitan, será necesario poner en firme los proyectos de resolución de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) sobre las metodologías del cargo por confiabilidad para la tecnología solar y eólica. Aun así, el cronograma de la subasta está muy ajustado para realizar la verificación de esta metodología para cada planta, y considerando que solo hay un auditor, sería conveniente revisar posibilidades para habilitar la participación expedita de estas plantas. Lo anterior, de no ser así, conllevará a una baja convocatoria en la subasta”.

¿Por qué es pertinente para el sector hacer esta nueva subasta de energía?

“Un atributo poco mencionado de las energías renovables no convencionales es que funcionan como complemento. Es decir, entre más diversa sea la matriz de generación de energía en Colombia, más confiable será el sistema. En ese sentido, la subasta de cargo por confiabilidad da luces de expansión para el parque de generación renovable no convencional, lo que se traduce en un incentivo para el desarrollo de nuestras empresas y pondrá en marcha los proyectos en el corto plazo”

La economista Alexandra Hernández, quien hasta hace pocas semanas fue vicepresidente de Asuntos Económicos y Regulatorios de la Asociación Colombiana del Petróleo y Gas (ACP), es la nueva directora ejecutiva de SER Colombia, el gremio que reúne a las empresas del sector de las energías renovables en el país.

En diálogo con EL COLOMBIANO, la líder gremial recalcó que Colombia tiene gran potencial para desarrollar proyectos de energías limpias con 32.000 megavatios (MW) en plantas solares y 30.000 MW en parques eólicos, lo que equivale a más de tres veces la capacidad instalada que hoy tiene el país.

Así mismo, con respecto a la nueva subasta de energía, Hernández subrayó que, si el objetivo es que los proyectos renovables no convencionales compitan, será necesario poner en firme los proyectos de resolución de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) sobre las metodologías del cargo por confiabilidad para la tecnología solar y eólica.

¿Cuál es el panorama de la transición energética en Colombia?

“Estamos hablando de un potencial de 32.000 MW en plantas solares y 30.000 MW en parques eólicos, lo que equivale a más de tres veces la capacidad instalada que hoy tiene el país, cifras que salen de nuestra hoja de ruta de penetración de fuentes renovables no convencionales a 2050.

Y desde el punto de vista del consumo, es importante seguir trabajando en la electrificación de la economía que implica acelerar la penetración de vehículos eléctricos y, fomentar la gestión de la demanda mejorando la eficiencia energética en industria y hogares. La transición en la oferta energética en el país tiene sentido en la medida que también cambien los hábitos de consumo”.

¿Cuáles son los retos para avanzar en el desarrollo de las energías limpias?

“Para atender los desafíos de corto y mediano plazo en la oferta energética, evitar riesgos de apagones y salir bien librados de un fenómeno de ‘El Niño’ como el que se viene anunciando, debemos redoblar esfuerzos para poner en marcha los proyectos renovables que las empresas están preparando. Se requiere de una articulación con el Gobierno Nacional, autoridades regionales y comunidades, para facilitar todo los procesos de consultas previas, licencias, y en general trámites y permisos, que son los que van a permitir la puesta en marcha de estas iniciativas.

Así mismo, sigue siendo necesario complementar el marco de política pública y regulatoria que existe en Colombia, para habilitar el cierre financiero de los proyectos de fuentes renovables no convencionales y balancear la cancha entre generadores y operadores a la hora de conectar y poner en operación los proyectos, ya que los retrasos por parte de operadores afectan las inversiones y cronogramas de los generadores”.

¿Cuáles fórmulas plantea el sector para destrabar proyectos renovables como los de La Guajira?

“La apuesta desde la Asociación va encaminada hacia el fortalecimiento institucional de los equipos de trabajo para apoyar el proceso de licenciamiento, trámites ambientales y consultas previas. Así como articular las políticas de transición energética con el ordenamiento territorial, mejorar los incentivos tributarios y de mercado que permitan aumentar la capitalización de recursos para la transición energética, como lo es la industrialización y el desarrollo de nuevos nichos de mercado local”.

¿Cuáles son las propuestas para que las energías limpias tengan un mayor protagonismo en la matriz de generación?

“Nuestras empresas asociadas se encuentran preparando proyectos renovables con un 16% de la capacidad total instalada actual para entrar en los próximos dos años, esto dará un protagonismo significativo que impactará la matriz de generación de energía eléctrica. De hecho, el inicio de operación de estos proyectos identificados equivalen a la misma capacidad que actualmente tiene el parque de generación a gas. Buscamos acelerar el ingreso de los proyectos para que de esta forma, la matriz sea mayoritariamente de energía renovable”.

¿Cómo será la articulación con el gobierno para integrar los fuentes renovables al sistema interconectado?

“Estamos jugando un papel fundamental como gremio para llevar propuestas que aceleren la entrada de proyectos renovables y lograr así la consolidación de la transición energética. Para esto debemos articular los ministerios y autoridades regionales y, adicionalmente, encontrar un balance entre la expansión de transmisión y de generación, pues los proyectos no lograrán ser integrados al sistema interconectado nacional si no existe la ruta de transmisión”.

¿Cómo analizan la nueva subasta que programó el gobierno?

“Si el objetivo es que los proyectos renovables no convencionales compitan, será necesario poner en firme los proyectos de resolución de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) sobre las metodologías del cargo por confiabilidad para la tecnología solar y eólica. Aun así, el cronograma de la subasta está muy ajustado para realizar la verificación de esta metodología para cada planta, y considerando que solo hay un auditor, sería conveniente revisar posibilidades para habilitar la participación expedita de estas plantas. Lo anterior, de no ser así, conllevará a una baja convocatoria en la subasta”.

¿Por qué es pertinente para el sector hacer esta nueva subasta de energía?

“Un atributo poco mencionado de las energías renovables no convencionales es que funcionan como complemento. Es decir, entre más diversa sea la matriz de generación de energía en Colombia, más confiable será el sistema. En ese sentido, la subasta de cargo por confiabilidad da luces de expansión para el parque de generación renovable no convencional, lo que se traduce en un incentivo para el desarrollo de nuestras empresas y pondrá en marcha los proyectos en el corto plazo”